Para empezar dar a conocer esta nueva sección de mi blog sobre alimentación, quisiera dar mi
voto de confianza a esos frutos secos que la mayoría eliminan de sus comidas
diarias y más aun de sus dietas por su alto contenido en grasas y elevado
aporte energético. Durante décadas se
les ha considerado como alimentos que contribuían en el aumento considerable de
peso, ahora se pueden encontrar muchos estudios que indican lo contrario como
el siguiente artículo de mibebeyyo.
Además de ser absolutamente deliciosos, los frutos secos son
ricos en proteínas, fibras, minerales como hierro, calcio, zinc, cobre,
fósforo, potasio y selenio, y varias vitaminas como la E, B1 (tiamina), B2
(riboflamina) y B6 (piridoxina). En efecto, estos alimentos contienen ácidos
grasos, sin embargo éstos son buenos para nuestro organismo, son insaturados y
nos pueden ayudar a combatir los problemas cardiovasculares.
No se niega que los
frutos secos tengan un alto contenido en calorías, pero al igual que
el colesterol bueno y malo no todas las calorías son iguales. Los frutos secos
son ricos en calorías activas, al requerir una masticación activa y potente se
queman parte de las calorías mientras nos las comemos y luego con la fibra y las proteínas que aportan requieren
digestiones largas en las que también gastamos más calorías. Todo ello además hacen que sean alimentos saciantes que nos ayuden a picotear
otros alimentos menos recomendables para nuestra salud ayudandonos asi en la dificil causa de adelgazar.
Claro está que todos estos estudios hablan de pequeñas
raciones, nada de abusar.
Salud para todos en un puñado de frutos secos como mínimo
cuatro veces por semana (según expertos)
Estos estudios se refieren a frutos secos en general, en la pestaña más sobre frutos secos seguiré explicando propiedades y curiosidades sobre los
frutos secos. Un árticulo para cada uno de ellos. Hasta pronto.
